EL PÁJARO NEGRO

Una noche de tempestad veo un pájaro negro.

Mis sueños se vuelven oscuros y escucho voces que me llaman.

Despierto confundida, ¿Por qué por la noche todo parece más real?

Aquí donde habito pasan cosas que nadie puede ver, pero yo las siento todas

las noches.

Acostada en mi cama miro la ventana, veo la lluvia y los árboles mecerse

con fuerza y también veo personas, no usan zapatos, sus vestimentas son

viejas y cuando veo sus ojos desaparecen dejando plumas negras en el aire.

Otra noche, otro pájaro en la ventana me mira fijamente, pareciera que

quisiera entrar. La gente dice que es mal augurio, pero ya no siento miedo.

Al ver los ojos de las aves también puedo verme a mí misma reflejada.

Nací entre mitologías de seres fantásticos y entes que se transforman en

animales.

Abro la ventana y el pájaro entra posándose en mi mesa, poco a poco veo

como deja de ser pájaro y se convierte en hombre. ¿es esto real?

Mirándome dice mi nombre y me extiende la mano, yo la tomo, ya no tengo

miedo.

Nací en esta isla llena de misterios oscuros, y ahora esos misterios me

abrazan.

Nombre

Constanza Belén Aguilar Bastias

25 años

Lugar de residencia

Ancud