Mi patrimonio es el horizonte, el cual me impone montañas dando la ilusión de poder tocarlas por lo cercanas que están, pudiendo divisar tipos de árboles, las casas, sus animales y sus huertos. Siendo algo mágico, ya que me separa el mar de aquellas montañas que en días despejados puedo ver claramente. Son también las toninas que juegan y cazan libremente en su mar, para deleite de las personas que las observan desde fuera del agua. Mi patrimonio es salir acompañada a caminar en la playa de Chullec en busca de caracolitos para luego llegar a casa y cocinarlos.
Paulina Aguilar Oyarzún
19 años
Dalcahue, Chiloé