BAUTISMO

Cuando visité esta cascada por primera vez, recordé lo que mi padre me contaba sobre mi abuela y lo que creía con respecto a los brujos y el bautismo.
Mi abuela Dina, era una mujer que dedicó completamente su vida a sus hijos y nietos, buscando siempre su felicidad y protección a través de las tradiciones familiares.
Y les decía a sus diez hijos que no quería nietos moros, o sea, sin el bautismo cristiano, ya que era una tradición religiosa inculcada en la familia de los Pérez -Pérez de Putemun y el no estar bautizado significaba también estar vulnerable a cualquier magia negra u oscuros poderes de la brujería chilota.
Contaba también, que su vecino Chiguay para convertirse en brujo se lavó el bautismo durante cuarenta noches con la cabeza bajo una cascada o Traiguen (que viene del mapudungun trayen y significa “canto del agua”) y de otros ritos que realizó para ser miembro de “La Brujería”.

Nombre

Javiera Mancilla Cifuentes

26 años

Lugar de residencia

Castro, Chiloé