PIEL DE HOGAR

¿Cuál es mi patrimonio chilote?  La piel de  muchas  casas chilotas, las tejuelas.

Si hay un patrimonio tangible hoy en día, de atracción turística, un sello en nuestra Isla que nos identifica a nivel mundial, son las hermosas escamas  de madera que sobrepuestas unas de otras adornan el exterior de las coloridas  casas chilotas.

Dicen mis ancestros que tienen vida eterna, que aguantan hasta el más fuerte de los temporales y que al pasar los años más rústicas se vuelven. Y tienen toda la razón.

Cuando visitaba la casona de  mi abuela, yo apenas tenía 8 años y en todas las estaciones, eran distintas las  sensaciones de estar ahí. En el verano por ejemplo, crujen por las noches…y en invierno absorben y aguantan  cuanta lluvia y temporal de viento caiga.

En otoño le dan calidez al interior del hogar, y en primavera se adornan de verdes musgos y  barba de viejo.

La casa para un chilote representa una necesidad vital, un lugar de cobijo y confort. De encuentro y folclor. Aguarda la esperanza, el trabajo, la alegría y el regocijo en torno a la  cocina, que pienso es el lugar fundamental, el corazón  de la casa.

Al pasar lo años nos fuimos dando cuenta que crecía la construcción de casas prefabricadas por la escasez de materiales que nos brindaba la madre naturaleza en conjunto con  la tala de árboles nativos,  y  ya no se aprecian tantas  construcciones de casas e iglesias en maderas de Alerce, mañío y Raulí.

Sólo espero que conservemos de una u otra manera las casitas e iglesias  que aún están en pie, que no se pierda esta tradición, esas texturas, colores y formas  nos pertenecen, esa piel de hogar es nuestro patrimonio.

 

Nombre

Carolina Soto

32

Lugar de residencia

Ancud, Chiloé